jueves, 12 de noviembre de 2015

Me quedo quieto y exploto!

"dele dele dele dele, ahí." 


"No te quedes inmóvil al borde del camino" (?) prefiero otros poetas y otros poemas, pero le pondría a esa frase de Benedetti algo como - no te quedes inmóvil al borde del tablero, o del aula, o del escritorio - sinceramente no entiendo cómo hacen para hacer nada en el aula... yo no hago nada y me exploto, me da la chiripioica, me da un colapso mental... es como estar en un parque de diversiones y sentarse de cara a un muro. No entiendo, simplemente no entiendo! ¿cómo demonios hacen para a veces no hacer absolutamente nada en el aula de clase? eso de soportar la mitad del día encerrado en un espacio realmente reducido mirándonos los rostros sin decir ni hacer nada me suena más a tortura que a cualquier otra cosa.

No hay excusa. para tener a los estudiantes apilados y esperando que el sistema cruel los consuma. sin enseñarles a defenderse de nada, a reírse de nada, a querer nada, a soñar nada, a no hacer absolutamente nada! porque muchas veces se vuelve una guardería para los niños, y un sanatorio mental para los profesores, donde pueden descargar su frustración al mundo y sentir que son ejemplares para la sociedad... una buena metáfora de una caja de cigarrillos. 

pero si la volteamos en su sentido puede ser -tal vez- más bella,  me refiero a un movimiento en el aula constante, encender todo lo que se toca por la mera pasión y el gusto de educar. ser tiro al blanco de todas las locuras e ideas y sueños de los alumnos, porque semillas es lo que llegamos a sembrar y no nos podemos quejar si luego sale muy grande el árbol... pero volviendo a la metáfora, cada uno en el aula un movimiento constante, fugáz y potente hasta que simplemente el tiempo nos marque el límite. pero NO QUEDARNOS QUIETOS esperando que algo pase y nos salve.... 

PD: ésta reflexión es corta porque es de una sesión que dirigió la maestra cooperadora en que prácticamente no hicimos Nada. necesitaba desahogarme. Gracias. 

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